El esfuerzo en la semifinal acabaría pasando factura a los italianos, que deberían enfrentarse a uno de los mejores equipos de la historia del fútbol, la selección brasileña de los Pelé, Jairzinho, Rivelino o Tostão dirigidos por Mário Zagallo, en la final en la que además se vivieron diversas situaciones inéditas en la historia de la competición: el enfrentamiento en la final de dos campeonas de la Copa del Mundo, el desempate por ver quién de las dos se convertía en la selección más laureada del torneo deshaciendo el triple empate existente, y por ver quién de las dos conseguía quedarse con el trofeo Jules Rimet en propiedad, por haber sido capaz de ganar 3 campeonatos. Inglaterra mantuvo tres empates consecutivos, empataron con los soviéticos 2-2, con Brasil 0-0, siendo este el primer empate sin goles en la historia de los mundiales, y con Austria 2-2. Más luego, en el partido de desempate con la Unión Soviética, fueron derrotados 1-0, quedando eliminados en primera fase, y finalizando en el lugar 11 de la tabla del torneo. En la reanudación, los italianos salieron decididos a ganar el partido, Giuseppe Meazza anotaría dos goles para la esperanza italiana.
El hecho de que todavía no se permitían las sustituciones, hizo que los primeros minutos de partido los italianos perdiesen a un jugador por una fractura en el pie debido a una dura entrada de Ted Drake. Pese a jugar todo el partido con 10 jugadores, super vigo los italianos plantaron batalla y dureza. La dureza siguió durante todo el partido, y a la finalización la Federación Inglesa consideró retirar a sus jugadores de todos sus partidos internacionales, conocidos como «caps». Este y la no designación de Inglaterra para albergar ninguna de las primeras Copas del Mundo fueron los motivos para la ausencia inglesa en la recientemente creada nueva competición en 1930, y los anteriores juegos olímpicos, en una maniobra por boicotear y desprestigiar a las competiciones internacionales, que se distanciaban de los intereses británicos. Rey junto a una de las mejores plantillas de la historia del club sevillano. Equipos como Uruguay e Italia se alzarían con los títulos de Mundial y Juegos Olímpicos en cada una de las ediciones desde 1924 hasta 1938 demostrando ser los nuevos dominadores mundiales del fútbol. El partido, recordado como la «Batalla de Highbury», deparó una victoria inglesa por 3-2 en el Arsenal Stadium. La alineación inglesa dejaría un récord que tardaría casi 7 décadas en ser igualado: hasta siete jugadores del mismo club defendieron aquel día a la selección.
En Berlín 1936, el Comité Olímpico Internacional anuló el resultado del partido Perú-Austria, organizando una repetición el día 11 de agosto. Era una de las selecciones más novatas nunca presentadas por Inglaterra. Inglaterra perdería así la supremacía futbolística. En el siguiente mundial de 1962 realizado en Chile, Inglaterra fue incluido en el grupo D que contaba con Hungría, Argentina y Bulgaria. En su primer partido, fueron derrotados por Hungría 2-1, pero luego, vencieron a Argentina 3-1, y empataron con Bulgaria 0-0. Ya en los cuartos de final, terminaron perdiendo por 3-1 ante su similar Brasil, quedando nuevamente eliminados en los cuartos de final, www.supervigo.com y finalizando octavos en la tabla del torneo. Finalmente, Inglaterra fue eliminado en primera fase, camisetas futbol finalizando octavo en la tabla del torneo. En dicho partido, estos fueron derrotados por los sudamericanos 4-2, quedando eliminados en los cuartos de final y finalizando séptimos en la tabla del torneo. Tras dicho mundial, Walter Winterbottom renunció su cargo como entrenador, y Alf Ramsey fue contratado en su lugar. Tras volver a ser miembro de la FIFA en 1946, Inglaterra decidió participar en la Copa Mundial de Fútbol de 1950 siendo este torneo su debut, y convirtiéndose en el primer país británico en participar en dicho torneo.
Como el resto de las selecciones, Inglaterra tardaría en recuperar su mejor versión. Ante todo ello, el equipo dirigido por Miguel Herrera se formó de jugadores mayoritariamente del torneo local y las incorporaciones de Raúl Jiménez y Jesús Manuel Corona (el único elemento que participaría en las dos competencias), jugadores que militaban en el extranjero . En el equipo se mantuvieron varios de los jugadores que disputaron el pasado mundial, con algunas caras nuevas, como Giorgio Chiellini, Alessandro Gamberini (que reemplazó al lesionado Fabio Cannavaro), Marco Borriello, Antonio Cassano y Antonio Di Natale. El equipo nacional utiliza camiseta naranja, por influencia de la Prinsenvlag. Como ya se había hecho entre 1955 y 1961, el segundo uniforme se estructuró de la misma forma que la bandera: amarillo en la parte superior (camiseta), azul en el medio (pantalones) y rojo en la parte inferior (medias). A lo largo de la historia, han sido más de doscientos futbolistas los que han vestido la camiseta de la selección de Ecuador. Stan Cullis que sería posteriormente expulsado de la selección.